Hace unos días, ronda en mi mente la fuerza que tienen las palabras en nuestra comunicación y la forma como nos relacionamos.
Mientras daba un paseo con mi nieta de siete años, al no obtener algo que quería, respondió con una expresión muy fuerte. En ese momento, le invité a reflexionar sobre sus palabras y como pueden afectar a las personas.
Este episodio me hizo recordar una experiencia que tuve como estudiante, cuando tenía quince años.
Durante un examen de inglés, una compañera con dificultad de visión me pidió que le leyera una palabra que estaba escrita en el pizarrón.
El profesor, al verme, asumió que nos estábamos copiando y anuló nuestras pruebas sin escuchar nuestras explicaciones.
Sentí mucha indignación, y en frente de mis compañeros dije: “ojalá le haga daño la comida que consumió hoy”.
Ese día, el profesor comentó que había comido una ración de langostinos, y al día siguiente, nos anunciaron que no asistiría debido a una intoxicación alimentaria.
Mis compañeros se fijaron en mí y recordaron mis palabras. Me sorprendí mucho porque no era mi intención que esto ocurriera.
Desde entonces, soy consciente de mi diálogo interno y cuido los términos que utilizo con las personas.
El lenguaje es un don maravilloso que tenemos los seres humanos. Es el medio principal para la comunicación y juega un papel crucial en la forma en que nos relacionamos con los demás y con nosotros mismos.
- Estamos hechos de palabras, nuestra identidad, los pensamientos y como nos percibimos. Le da nombre y forma a las cosas que nos rodean, y lo que comunicamos a otras personas.
- Las palabras influyen en nuestro estado de ánimo porque llevan la carga emocional de nuestras experiencias, recuerdos y creencias. Pueden impulsar o limitar nuestra conducta.
- Las palabras tienen un enorme poder, salen de nuestros pensamientos para transformarse en acciones y así crear nuestra realidad.
Seamos cuidadosos con nuestro vocabulario, las palabras pueden convertirse en un arma letal o en un recurso para ayudar.
“Las palabras tienen el poder de curar o destruir, así que elige cuidadosamente tus palabras”. – Buda
Siete claves para desarrollar un lenguaje positivo y saludable.
La buena noticia es que podemos entrenar nuestra manera de comunicarnos. Aquí te dejo siete claves para desarrollar un lenguaje creativo, positivo y saludable.
Presta atención a tus pensamientos. Observa como te hablas a ti mismo y selecciona tus palabras antes de hablar con los demás.
Sustituye los pensamientos negativos por afirmaciones que generan una emoción positiva en ti. Ejemplo: “puedo”, “quiero”, “decido”.
Usa términos respetuosos y amables al tratar a las personas. Evita las etiquetas, palabras ofensivas o discriminatorias.
Escucha atentamente para comprender la perspectiva y los sentimientos de sus interlocutores antes de responder.
Conecta con la otra persona. Muestra comprensión y empatía, incluso cuando no estés de acuerdo.
Exprésate con claridad y precisión para comunicarte de manera efectiva.
Presta atención al tono de voz y lenguaje corporal, ya que pueden afectar el significado de nuestras palabras y cómo son percibidas por los demás.
En resumen, practica un buen uso del lenguaje a diario, en la medida que eres constante y consecuente podrás apreciar como mejora tu realidad y la interrelación con tu entorno.
Que la magia de tus palabras amables lleven paz y bienestar a la humanidad.
Te acompaño en tu camino de bienestar ¿Hablamos?
Bendiciones de Luz.
Muy buen artículo “El eco de las palabras…”, Maestra Elsa.
Sencillo a la vez que trata sobre un tema profundo…
Invita a la reflexión a la vez que brinda consejos para mejorar el manejo de nuestro lenguaje.
Estoy convencida de que si todo el mundo reflexionara sobre ésto, el mundo sería mucho mejor.
Esto me lleva a realizar está reflexión, aplicándola sobre mí misma, revisar mis pensamientos y mis palabras…
Al fin y al cabo la “lengua es el brote del corazón” (medicina china) y “la palabra habla de lo que hay en nuestros corazones”…
Gracias por compartirlo con nosotros.?????
Hola, Isabel. Que hermosa tu reflexión y muy cierto “La lengua es el brote del corazón”. El lenguaje responsable contribuye con nuestro bienestar y también a influir por un entrono más amable.
Gracias 🙂
Hola querida maestra muy interesante e importante el artículo sobre El eco de las palabras, muy enriquecedor para nuestro crecimiento espiritual aprender sobre como mejorar nuestro léxico y atraves de el emitir mensajes positivos a todos los humanidad. Agradecida con el universo por tener una guía espiritual tan especial gracias maestra por su bondad y amor
Hola, Francys. Gracias por pasar por aquí. Me encanta que el artículo sea útil para ti y como bien dices, con nuestras palabras, contribuir con al bienestar de la humanidad.
Gracias 🙂